Sábado, tres de la mañana. Raquel y yo volvemos a casa en un taxi, después de pasar la noche con nuestros amigos Cris y Mono. Por el camino observo la cantidad de gente que hay en la calle, y lo bonito que es vivir en una ciudad que, realmente, nunca duerme.
En un semáforo paramos junto a un colega de nuestro taxista. Baja la ventana y dice:
- Qué asco de noche.
Beauty is in the eye of the beholder.
28 junio 2009
Qué asco de noche
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6 comentarios:
En Irlanda decían "Beauty is in the eye of the beer-holder". Por lo demás, estoy de acuerdo contigo, mola vivir en una ciudad que nunca duerde. Como mucho, sestea :)
Como curiosidad, esta entrada está escrita en presente porque la escribí en el propio taxi. La primera vez que publico en el blog desde el iPhone.
Esto me recuerda un comentario que me hizo una vez alguien (respetaré su anonimato por razones obvias): "Odio despertarme todas las mañanas con el ruido de los pájaros cantando en mi ventana".
Si el canto de los pájaros es ruido... En fin. Bueno, para mí es de las mejores cosas de la vida.
Y deja de fardar de iPhone, maldito capitalista.
Como esos cretinos que se compran una casa en un pueblo y luego piden que prohíban el ruido de los cencerros de las vacas.
Jo, pues con lo que yo echo de menos el despertarme en verano en casa de mis padres, con el canto de los pájaros y el balar de las ovejitas! Hay gente muy cateta, ya te digo :D
Me encanta esta entrada :)
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