17 enero 2008

Estoy como un pan

Como seguís dejando buenos deseos en mi entrada anterior (gracias), voy a actualizar este blog, aunque sólo sea para decir que ya estoy bien.

De la gripe sólo me queda la típica tos del convaleciente, cada vez menos. He ido a trabajar normalmente toda la semana sin problemas (ni ganas, pero de eso no tengo nunca).

Hoy he estado viendo a mi médico para enseñarle los resultados del reconocimiento médico que nos hicieron el mes pasado en la empresa. Me ha dicho que estoy muy bien y que no me preocupe de nada. Y que no estoy gordo, pese a los infundios que pusieron en la hoja de resultados (y que han llevado a cierta gnoma que trabaja conmigo a llamarme "¡Gordiiiiito!" cada dos por tres).

Este fin de semana me voy a Zaragoza. Hoy es el cumpleaños de mi tía, le ha caído el tercer cuarto de siglo, así que el sábado vamos a celebrarlo. Y, de paso, veo a mi madre, que está bastante depre en los últimos tiempos. A ver si conseguimos que se anime un poco, pobre. Aunque lo que ella necesita es tener nietos, y eso... me temo que lo lleva claro.

4 comentarios:

Capitan Napalm dijo...

Para la progenie que ibas a tener, a lo mejor cuela que le compres un mono a Lady Tello, que bastante desgracia tiene la pobre con lo que le cayó.

Fantine dijo...

Como decía Obelix, tu no estás gordo mañico mío. Tan sólo eres un pocito bajo de tórax ;)

Me alegro de que ya estés bien. Y no le hagas caso al tarado del Capi, que ya le gustaría a él a tu edad estar la mitad de bien que tu. Que al paso que va el pobre, lo veo con un cuádruple by pass o algo peor :P

Sandra dijo...

Anda, qué te cuesta darle una alegría a tu madre??? Desde luego...

Imperator dijo...

Según me ha comentado el responsable de Estudios y Proyectos de la agencia de empleo en la que curro, tener un hijo te cuesta a lo largo de tu vida, unos 360.000 €.

La próxima vez que alguien te diga algo como lo de siringa, puedes contestarle eso ;)