25 marzo 2004

Maruja Torres

Anoche estuve viendo la grabación de un programa de TV. Se llama "Noche sin tregua", es un programa nuevo de la Paramount Comedy y, para que os hagáis una idea, es un estilo al de Fuentes.

Tuvieron cuatro invitados. La primera, una pseudo-cantante que decía haber recibido su nombre artístico ("Winchester") porque la llamaban "Wittgenstein" porque era muy inteligente. No estábamos seguros de si era una broma, o sus amigos eran unos cachondos, porque la chica parecía bordear la oligofrenia. No sé si realmente era consciente de lo graciosa que resultaba cuando declaraba su admiración por Melody.

La segunda, una chica que ha ganado hace poco el premio Nadal e intentaba desesperadamente llamar la atención y demostrarnos lo maravillosa que era. Igual de deprimente que la anterior. Decía que no ligaba nada, cosa que siempre queda muy profunda y muestra una rica vida interior, pero en su caso nos lo creímos.

En esto que la tercera invitada era Maruja Torres. Estaba de promoción de un libro nuevo que acaba de sacar. Y también estaba bastante borracha. Con el sólido pedo que llevaba y todo, le costó cosa de medio minuto dejar clara la diferencia entre las aspirantes que acabábamos de ver y quien vale de verdad. Poco a poco, fue ganando confianza y no dejó títere con cabeza. Al final, arremetió contra la Familia Real y fue la bomba. Quienes me conocéis sabéis que yo no soy muy republicano, pero lo que más me molesta de las soflamas anti-monárquicas es el ínfimo nivel de la gran mayoría de ellas. No fue el caso de Maruja, claro.

El último invitado fue José Manuel Lorenzo, como posible futuro director general de RTVE y, aunque es un tipo interesante, lo tenía difícil después del fenómeno que le había precedido. Estuvo bien, de todos modos.

Moraleja: si alguna vez tenéis la tentación de hacerlos los interesantes, tened cuidado, no venga detrás alguien que realmente lo sea y os deje a la altura del barro.


1 comentario:

Gorpik dijo...

Curiosamente, Rakel Winchester y yo hemos tenido algún contacto después de escribir yo esta entrada y ahora me parece una chica muy maja. Incluso he empezado a apreciar un poco su música. Bueno, ya se sabe que no hay que fiarse demasiado de las primeras impresiones.